Buscar este blog

30 de agosto de 2011

Cómo ser buenos, de Nick Hornby



La última lectura que he finalizado estas vacaciones ha sido Cómo ser buenos  de Nick Hornby.  Es mi primera lectura de este gran escritor británico y la verdad es que me ha sorprendido gratamente. Sorprendido porque pese a las buenas críticas que había leído de su obra, no me lo esperaba tan cínico e irónico, y eso me ha encantado.

¿Y de qué va? Pues la novela se centra en Katie, una mujer madura, casada, con dos hijos, y que se cree que su aporte de bondad al mundo ya está cubierto por el simple hecho de ejercer como médico (estos especímenes existen, conozco unos cuantos).

Pero Katie está pasando una crisis personal importante. Está cansada de su trabajo y muy, pero que muy cansada de su vida familiar, más en concreto de su marido David. David es el típico personaje (digo típico porque todos conocemos a alguno) enfadado con el mundo, que no para de quejarse y de criticarlo todo. De ahí el título de la columna que escribe denominada “El hombre más airado de Holloway” y que de momento es el único trabajo que tiene.  

Y así, con este asfixiante panorama, en un congreso fuera de su ciudad, Katie acaba teniendo una aventura con otro hombre. Este desliz le proporcionará a Katie el impulso necesario para pedirle a David el divorcio. A raíz de este hecho, David pasa un par de días con un curandero (en realidad un joven ex drogadicto) que se hace llamar GoodNews. Tras esta breve “terapia” a la que se somete, David decide replantearse su vida, sus valores y sus objetivos. Así que gracias al efecto que GoodNews ha ejercido sobre David, éste deja de ser el personaje cascarrabias y cínico de los inicios de la novela para convertirse en el marido que perdona la infidelidad de su esposa, en el vecino encantador que acoge adolescentes sin hogar en su casa y en el padre que obliga sus hijos a compartir sus cosas con los más necesitados. Se convierte, de la noche a la mañana, en el hombre más bueno y comprensivo del mundo.

Toda esta transformación aturde a Katie, quien empieza a echar de menos a ese antiguo David, a ese cinismo que llegó a odiar y a esas bromas que la hacían salir dando un portazo. Todo esto le genera la desesperación de no tener claro que es lo que quiere ya que también empieza a dudar de la percepción que ella tiene de sí misma. No está tan segura de ser buena persona, ya no, aunque sea médico. Ni siquiera sabe si le gustan las buenas personas. El hecho de vivir con alguien que es un derroche de bondad hace que su egoísmo y su sarcasmo se vea amplificado. Ahora es ella la que adopta el papel de cínica, ella es la mala de la película. Katie empieza a dudar de sí misma, de cuáles son sus sueños y de qué es lo que quiere y necesita en la vida para ser feliz.



Un libro muy inteligente, con mucho cinismo, como ya he dicho, y que se cuestiona la moralidad de la clase media, la hipocresía, el aislamiento social y el egoísmo bajo el que vivimos, con el agravante de considerarnos además buenísimas personas. Nick Hornby retrata unos personajes muy reales que hacen que reflexionemos también sobre nuestra propia moralidad y nuestra vida. Porqué ¿qué es ser bueno? ¿somos seres en inconstante insatisfacción? ¿qué nivel de implicación con los demás tenemos en nuestra vida? ¿vivimos de manera coherente con nuestras ideas? El libro invita a plantearse éstas y un montón de cuestiones más. 

Con todo esto deciros que repetiré seguro, ya que a parte de la historia me ha gustado mucho el estilo del autor. Hay unos cuantos diálogos que los he encontrado sencillamente geniales. Una buena lectura.

24 de agosto de 2011

¡¡El retorno!!

Ya hemos vuelto, ya estamos de nuevo aquí, luchando contra este calor infernal al que ya no estábamos acostumbrados y contra los mosquitos. Y es que... qué bien se estaba en las montañas! Estas vacaciones hemos estado en Austria,  en la parte del Tirol y en Salzsburg y alrededores. Una escapada a Munich y paradas en Berna (a la ida) y Annecy (a la vuelta) cayeron. Así que un montón de quilómetros y un montón de idiomas chapurreados (francés, alemán y con un poco bastante más decencia el inglés). Mis hijos ya se han acostumbrado a no entender nada de lo que les dicen, y llevan una "empanada mental" que ahora, desde que llegamos, a la que nos alejamos 10 km de casa preguntan i aquí que parlen? (y aquí que hablan?)


Una vacaciones muy familiares, es unos entornos espectaculares, eso sí, con una comida muy justilla (estoy del Wiener Schnitzel, carne empanada, y del Apfelstrudel hasta las narices) pero con las pilas totalmente cargadas. Mirar que montañas. Y todo el mundo camina, todo el mundo. Sólo deciros que estaba en algo parecido a un bosque haciendo pipi ( supuestamente alejada del mundo) cuando de repente oigo cloc cloc cloc , me giro y me encuentro una mujer que me sacaba tranquilamente 40 años con MULETAS bosque a través. Mejor eso que un jabalí, pero vamos, que no daba crédito.




Literariamente hablando las vacaciones han sido un fracaso, no he leído prácticamente nada, como me suele pasar cada vez que hago vacaciones,la verdad. 



Cómo aún tengo días de vacaciones a ver si soy capaz de publicar reseñas de libros que tengo pendientes (Frankenstein, Mapa desplegable del laberinto, Cómo ser buenos, ...) y volver a leer un poco!!


Os dejo mi foto preferida de estas vacaciones.  


Mi hija , qué guapa está!
De hecho, el efecto al empujarla era éste:



Así que se acabó rápido el columpio porqué me daba un miedo que saliera volando...

Bueno, ¿y qué tal vuestras vacaciones? ¿Leéis mucho en esta época del año, con el calor, los niños, la playa, la piscina, la montaña, y los amigos ?






2 de agosto de 2011

Por fin, vacaciones!

Y ahora un poco de relax.... como me voy a las montañas tirolesas dónde no tengo ni idea de si voy a tener Internet, no sé si voy a poder escribir alguna cosilla ni mirar vuestros blogs así que por si acaso, bones vacances a tots i totes i fins la tornada!!