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22 de octubre de 2011

1Q84 Libro 3, de Haruki Murakami.



Con el tren atestado de gente un viernes por la tarde, con algún codo incrustado en mis costillas, mis fosas nasales saturadas por el exceso de olores corporales y con una semana horrible a mis espaldas. Este fue el entorno en el que finalicé la tercera parte de 1Q84 y por defecto la trilogía. 
Cerré el libro y lo primero que pensé fue “Espero que Susana todavía no se lo haya comprado, ya se lo dejaré yo porqué no vale la pena….”

Así que ya veis, para acabar de redondear tan funesta semana me sentí bastante decepcionada por esta tercera parte tan pobre, aburrida y con la sensación de que no hacía falta, de ser una obra de relleno. Si no nos iba a aportar nada nuevo, o prácticamente nada no hacía falta editar un libro de 414 páginas. Prácticamente no hay acción, muchas reflexiones pero repetitivas. Tres protagonistas y más o menos todos van llegando a las mismas conclusiones pero en momentos diferentes. El resultado es que el lector lee la misma conclusión por triplicado, supongo que es la manera de cerciorarse de que el lector un poco tocho es capaz de entender lo que se le está explicando. Un punto insultante incluso.

Eso sí, al más puro estilo Murakami, la historia se queda con muchos interrogantes a los que cada uno le puede dar la interpretación y el simbolismo que le apetezca, pero esto ya es típico en este autor, así que este punto para mí no ha sido sorprendente.

Me parece que estoy siendo muy radical pero es que los dos primeros volúmenes me gustaron bastante y éste ha sido un chasco de los gordos. No es que esté mal escrito, es que me ha resultado insustancial. Si tuviera que adjetivarlo diría que el libro es aburrido.

Cómo os he dicho, he tenido una semana bastante negra así que igual mi positivismo y tolerancia estaba en otro mundo y mi sentido crítico trabajando horas extras, pero ésta ha sido mi sensación.

De todas maneras, si habéis leído los anteriores os habéis de leer este tercero. Aunque sea por tranquilidad mental, si no se lee el tercero no has llegado al final. 

11 de octubre de 2011

Ya está en mis manos: 1Q84 Libro 3



http://www.tusquetseditores.com/titulos/andanzas-1q84-libro-3
Pues sí, ya lo tengo! ayer llegó a mis manos y no voy a tardar en empezarlo ya que me quedan muy poquitas páginas de El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde (por cierto, fascinante, casi más el análisis que se hace de la obra en la edición que me estoy leyendo que la propia historia), pero bueno, esto será otro post. 


Volviendo al mundo de las dos lunas: no he querido buscar ninguna reseña, no quiero saber nada de nada hasta leerlo yo. Y seguro que ya hay alguien que lo ha leído y lo ha reseñado ya que salió a la venta el 3 de octubre, si no recuerdo mal, pero prefiero leerlo sin ningún tipo de influencia externa.


Demasiadas expectativas tengo en este libro... espero que no me defraude...Me voy a leer un rato.


Buen miércoles festivo y si pasa alguna Pilar por aquí, felicidades!! 

7 de octubre de 2011

Crónica Insignificante, de Emilio Casado.




Este libro lo leí gracias a Tatty. Su reseña del libro hizo que inmediatamente esta novela captara mi atención. Entré en Bubok (es un libro autoeditado) y me lo compré en formato electrónico. Y en cuanto acabé el bodriazo que me estaba leyendo me puse con él.

Me llamó la atención que no era una gran historia, a ver, me explico. No podemos decir que tenga un argumento complicado, una trama retorcida, sino que es un trozo de la vida de Marcelo, el protagonista. Y Marcelo puede ser tu vecino o uno de tus amigos, un personaje de unos cuarenta años, recién separado, con una hija que ve quincenalmente producto de una separación más o menos amistosa pero que le ha dejado sin un duro y con un trabajo que pocas posibilidades le otorga de reponerse. Porqué Marcelo es psicólogo y trabaja en una prisión, en un entorno un poco hostil a veces, y ni siquiera tiene plaza fija. Y vive con sus padres, un matrimonio peculiar y típico a la vez, madre que le prepara la merienda y un padre ex policía que le va echando cables constantemente, agudizando así la sensación de dependencia que tiene Marcelo.

La novela está escrita en primera persona, es el propio Marcelo el que nos narra este pedazo de su vida que nos permite conocerlo a la perfección. A él y a su entorno. Para mí la gracia o el mérito de esta novela es la naturalidad que desprende. Parece que Marcelo te lo esté explicando todo con el máximo detalle, con un ritmo que dedica el mismo tiempo a todos los momentos del día. Claro que algunos son bastantes más aburridos que otros, pero creo que para que la propia sensación de ser espectador de la vida de alguien, de voyeur, ese toque de ciertas situaciones aburridas o cansinas le dan más realismo. Al fin y al cabo, la vida de nadie es una fiesta 24 horas seguidas y Marcelo no iba a ser menos.

Un libro que nos recuerda que la vida da muchos giros. Qué un día tienes una familia, una posición económica estable, un coche, y los domingos comes con tus padres. Y de repente cenas cada día con tus padres, ves a tu hija cada quince días y no tienes dinero ni para llevarla a un parque de atracciones.

Y con todo esto no os penséis que Marcelo me ha caído estupendamente bien, más bien me ha parecido un ser que se deja llevar por las situaciones, poco luchador, de estos especímenes que se acomodan. De los que necesitan que un gran golpe de efecto se produzca en su vida para poder reaccionar. 

Para finalizar, un brillante final, muy sorprendente. En fin, un muy buen de sabor de boca que me deja Crónica Insignificante, mi primer libro electrónico.